Equilibrio Físico-Emocional: Ser padres es una decisión para toda la vida
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Este tema me pareció importante desarrollarlo, porque en mi consulta últimamente he tenido pacientes que quieren ser madres por la edad, manifiestan que no le importaría criarlos solas, la presión familiar, social o la propia creada por un asunto cultural, es mayor a lo que representa tener un hijo.
Este deseo o necesidad claro que pueden satisfacerlo y ser madre. Lo que pasa que un hijo no es algo que agrego a mi vida y ya, es algo que se integra a sus vida y los lleva necesariamente a modificar todas sus estructuras, rutinas y muchas otras cosas.
Es algo que se debe planificar muy bien y aun así hay que contar con imprevistos. Es un ser humano que vamos a ir conociendo en la medida que van creciendo y teniendo sus propias experiencias. En fin ser padres es toda una aventura.
Todos los adultos sabemos cuándo comienza la maternidad y la paternidad, pero no se sabe hasta dónde nos va a ir llevando.
Esta bella experiencia comienza con los primeros años de vida del hijo, bien por los requerimientos del bebé o por sus manifestaciones de salud y adaptación. Paciencia, constancia, entrega que muchas veces los llevará a perder la calma para luego recuperarla.
Es asumir el compromiso de llevarlos de la mano y soltarlos cuando nos dan señales de que están listos para volar. Es celebrar sus logros, es sentir miedo y a la vez mostrar serenidad.
Son esos maestros que nos llevan a conocernos a nosotros mismos, en vernos reflejados en ellos, en los caprichos, en cada enfermedad, en cada incertidumbre, temores ante una decisión, alegrías y también frustraciones o satisfacciones.
Es una formación constante de padres e hijos, nos permite ver la capacidad ilimitada de aprender tanto ellos como nosotros. El amar y entregar con pasión.
Así que el ser padres es una tarea exigente y otras veces compleja, para la cual no existe una fórmula ni patrón a seguir, pero si fluyes y te pones en los zapatos tuyos cuando tenías ese tamaño, te aseguro que te divertirás y la compasión se instalará en ti, y cuando estos maravillosos seres llegan a la adolescencia tendrás este sentir necesario para entender este proceso complejo para ellos.
Las relaciones con los hijos pasan por momentos diversos, tensos, agradables, conflictivos y de riesgos. También los padres pasarán por momentos críticos que les dificultará la guía y apoyo para sus hijos, es el momento de apoyarse en un profesional para que les facilite herramientas para solventar cualquier situación.
Si bien es cierto que la sociedad de hoy resulta compleja, y que avanzamos en el mundo muy rápido, y con ello la economía, lo intelectual y competencias de diversa índole, es sano mantener una buena relación fuerte, amorosa porque es el eje fundamental de la familia y de la sociedad.
El amor, la compresión, el respeto, las palabras pensadas y entregadas en el momento oportuno, la ternura, el mirarse a los ojos, el abrazarse, son importantes bases para el ser y la sensibilidad humana de ese ser cuando sea adulto.
Siempre se da lo que se sabe o conoce, nunca pienses que es mucho o poco, tienes el derecho de disfrutar de las travesuras y risas de tus hijos, suelta el formalismo y ríe de sus ocurrencias, travesuras. Abrázalos mucho y siempre recíbelos al llegar a tu lado, donde quieras que estés, también tú te sentirás que llegas a un lugar de amor
